¿La UEFA no interesa?

¿De verdad que no?

Yo veo equipos, magnificados día tras día desde los púlpitos informativos centralistas, que se apuntan a la Intertoto mientras esos falsos y pedantes poseedores de la más absoluta de las verdades claman por activa y por pasiva que “la UEFA no interesa”.

El Sevilla FC se acaba de meter en esa competición “ruinosa” por partida doble esta gloriosa temporada 05/06, la temporada de su no menos glorioso Centenario; por ser el mejor quinto clasificado en toda la historia de la Liga y por ser el Campeón actual de dicha competición UEFA. Y no sólo eso, sino que este va a ser el tercer año consecutivo que el Sevilla FC dispute competición europea. Reto muy difícil de igualar, al alcance sólo de los más grandes del panorama futbolístico nacional. Y repito, en la temporada de su Centenario, porque hasta el 14 de Octubre de 2006 no cumple el Sevilla FC sus 101 años. Que me demuestren lo contrario esos que se empeñan en gritar que el Sevilla FC ha ganado la UEFA a sus 101 años de vida.

Pero volvamos a la “ruina” que supone la UEFA CUP. Si algo ha demostrado el Sr. Don José María del Nido en los cuatro años recién cumplidos que lleva al mando de la nave blanca es inteligencia, por lo tanto la pregunta con que se abre este artículo está sobradamente contestada.

Uno de los fines de clasificarse para competición europea es, entre el reconocimiento deportivo y el engrandecimiento sentimental, el de hacer caja, no nos engañemos. El Sevilla FC ha llenado el Ramón Sánchez Pizjuán partido tras partido. ¿Eso no es hacer caja? También es verdad que este Sevilla FC nos empuja a los aficionados a acudir en masa hasta a un amistoso contra el Talavera, con todos los respetos, pero no deja de ser mérito del club este hecho ¿no creen?.

También los hay, ahogados en su propia bilis y entregada su mente a la envidia y la ira, que intentan desprestigiar esta competición hoy por hoy del Sevilla FC y hasta el 16 de Mayo del 2007 como mínimo. Que se lo digan a participantes de esta gloriosa temporada sevillista como el Everton (Recopa ´85), Feyenoord (Copa de Europa ´70, Intercontinental ´70, Uefa ´74 y ´02), Bayer Leverkusen ( Uefa ´88), Galatasaray ( Uefa ´00, Supercopa ´00), Sampdoria (Recopa ´90), CSKA de Moscú (Uefa ´05), Hamburgo ( Copa de Europa ´83, Recopa ´77), Schalke 04 (Uefa ´97), Steaua Bucarest (Copa de Europa ´86, Supercopa ´86), por poner un ejemplo de equipos galardonados que se han quedado en el camino que marcaba el Sevilla FC y no seguir con los AEK de Atenas, Rennes, Lokomotiv de Moscú, Mónaco, Stuttgart, Brujas, Palermo, Roma, Lille, Marsella, Udinese. Preguntadle a todos estos equipos a ver que piensan de esta competición y si quisieran jugarla el año próximo o no.

Por cierto, que el próximo curso europeo en lo que a la UEFA CUP se refiere ya tiene candidatos a arrebatarle el título al actual campeón: West Ham United, Tottenham Hotspur, Roma, Lazio, Paris Saint-Germain, Eintracht de Frankfurt, Schalke 04, Bayer Leverkusen, Feyenoord, Panathinaikos, Besiktas, Brujas,… todos con la vista puesta en el trofeo que luce con más fuerza en el Sur de España, dentro de las vitrinas del mejor equipo de la historia del fútbol de Madrid para abajo.

Ah, que se me olvidaba; entre los ganadores anteriores al Sevilla FC de este trofeo se encuentran, por poner sólo un ejemplo, Valencia, Oporto, Liverpool, Parma (en dos ocasiones), Inter de Milan (en tres ocasiones), Bayern de Munich, Juventus (en dos ocasiones), Ajax,… y tomando sólo como referencia los últimos 15 años de competición.

El Sevilla FC se abre un hueco para poner su nombre en una copa al lado de placas con los nombres de los equipos como los que acabamos de ver.

¿De veras que no interesa esta competición?

Que me demuestren lo contrario…

Recuerdos

Tenía que llegar de nuevo el día en que la sangre me volviera a regar por lo dedos de mis manos. La misma sangre roja que, llena de oxígeno tomado de los aires holandeses, no ha hecho otra cosa en todos estos días que suministrar vida al lóbulo cerebral que esconde con exceso de celo el recuerdo de unas vivencias a 2200 kilómetros de distancia de la ciudad en la que tengo el orgullo de vivir y de sentir en todas sus formas, SEVILLA.

Estos mismos dedos de mis manos, más involucrados días atrás en perpetuar el sueño uefero en forma de pellizcos sobre mi cara que en plasmar experiencias sobre el papel han empezado a producirme un picor especial en forma de vocabulario para decirme que ya va siendo hora, que el sueño ha dejado de ser tal y que hay que contar lo que se tiene dentro.

Y es entonces cuando me viene a la memoria aquel 1 de Septiembre de 2005. Ya no estaba Joaquín Caparrós en el banquillo de Nervión. Lo cambió al término de su contrato por el del Deportivo de la Coruña y el Sevilla FC suplió su baja con el otrora técnico del eterno rival Juande Ramos. Se acababa de ir Sergio Ramos del Sevilla FC con destino a la Galaxia Blanca para sumar una nueva baja al club sevillano tras la venta de Julio Baptista, días antes, al mismo club. El mejor técnico de la historia reciente sevillista, la mayor esperanza de la saga rojiblanca y el mayor goleador de los últimos tiempos ya no estaban en el club. Por el contrario, habían arribado a Nervión nombres como Kanouté, Maresca, Palop, Luis Fabiano y Dragutinovic. La prensa no dejaba pasar la oportunidad de machacar al Sevilla FC argumentando que lo que había llegado no llegaba a suplir lo que se marchó. Que si Kanouté promediaba 8 goles por año y Luis Fabiano en Europa no se había encontrado con el juego que practicaba en Brasil, en contraposición con los 25 goles por año que promediaba el vendido Julio Baptista; que si Maresca era un trotamundos que iba de cesión en cesión por parte de la Juventus de Turín sin llegar a romper en ningún lado; que si Palop venía de vuelta de todo y su motivación no era más que la económica; que si Dragutinovic fue fichado deprisa y corriendo horas antes de aquel último día de traspasos en el que Sergio Ramos decidió convertirse en proscrito por el Pizjuán; que si Juande Ramos no le iba a dar a este equipo la garra que caracterizaba al juego de Caparrós…

Me da un salto la memoria. Ahora estoy en un 10 de Mayo de 2006. Son las 6:30 de la mañana y estoy aparcando mi coche en las proximidades del Estadio Ramón Sánchez Pizjuán. He quedado allí para partir hacia el Aeropuerto de San Pablo, desde cuya pista se puede leer un cartel que pone “SEVILLA”. Polo rojo, pantalón vaquero, bufanda al cuello, documentación, dinero, billete de avión y una entrada de fútbol; en ella se puede leer sobre su parte superior “EINDHOVEN 2006 PSV STADION May 10,2006 20:45 hrs”. En su parte inferior, sobre el código de barras, se lee “SUPPORTER FC SEVILLA”.

Retrocedo ahora en el tiempo. Estoy en el 14 de Octubre de 2005. Hoy mi club cumple 100 años. Bendito e inolvidable Centenario para los sevillistas. El recuerdo de aquellos que nos dieron el primer empujón hacia el sentimiento blanco y rojo es inevitable. Aún me veo con mi abuelo Pepe, en aquel salón de un piso del Parque Miraflores, donde un plato giradiscos marca Thomson que contenía también reproductor de casetes y radio AM-FM se convertía en el nexo entre el amor de aquella sala y el del profesado a aquel equipo que se disponía a jugar un partido fuera del Ramón Sánchez Pizjuán. Nos sentábamos mi abuelo y yo en un sofá que era coronado por un lienzo de plata del que emergía labrado el torso y la cara, ¡¡que cara!!, de Nuestra Señora de la Esperanza Macarena. Un lienzo de plata… de plata.

Pero vuelvo a irme al 10 de Mayo de 2006. Ahora son las 13:00 horas. Recién acabo de aterrizar en Eindhoven, si, ese nombre que pone en la entrada que llevo en el bolsillo y me encuentro en una plaza donde el sevillismo no es que se vea, es que se puede tocar. La alegría es desmesurada, los cánticos imparables, la demostración de sevillanía incontestable. Parece como si estuviéramos en el Nervión Plaza un día de partido pero con una sobredosis de ilusión como no se ha sentido jamás. El reencuentro con sevillistas que hemos ido dejando en los cruces del camino que nos depara la vida es inevitable. Allí somos todos los que estamos, aunque por desgracia no podemos estar todos los que somos.

Pero me voy de nuevo atrás en el tiempo, exactamente a un 19 de Noviembre de 2005. Ese día se jugaba el derbi de los derbis en la capital de Andalucía, el Sevilla-Betis. El Sevilla FC venía de una mini concentración en Ronda, y un gran grupo de sevillistas tuvimos la idea de esperar al autobús del equipo en la rotonda de la entrada de Utrera, para formar tras nuestros jugadores una Marea Carmesí que empezara a empujarlos a la victoria desde primerísima hora de la mañana. Desde Utrera hasta el Ramón Sánchez Pizjuán se pudo ver como decenas de vehículos escoltaban a los nuestros con banderas y bufandas al viento, llenando de color pasional inconfundible las calles de la ciudad que le presta su nombre a mi pasión deportiva. Mientras esto ocurría, otro grupo de sevillistas cumplían el sueño de la Giralda y la vestían de Carmesí con la complicidad del Giraldillo, que lucía sonrisa orgullosa y quien, en medio de un ataque de sevillismo incontrolable, reclamaba para sí una bufanda que llevarse al cuello. Por supuesto que el partido se ganó, uno a cero, con nueve hombres de blanco sobre el césped contra once de unos de verde que no les llegaban en coraje, en fútbol y en ganas a los nuestros ni a la suela de las botas.

Pero ¿ahora donde estoy? Me encuentro dentro de un estadio de fútbol en el que es la primera vez que entro. La mitad del estadio canta como se canta en el Ramón Sánchez Pizjuán, pero a la otra mitad no la entiendo. Ahora salen unos niños vestidos del color de la paz con unos globos blancos y naranjas. Si, no hay duda, estoy presenciando el espectáculo previo a algo grande. Veo la entrada que se asoma por el bolsillo del pantalón y la tomo. En ella puedo observar en su esquina superior izquierda el dibujo de una Copa, preciosa, y bajo ella unas palabras; “UEFA CUP FINAL”. Si señor, ahora sí. Empiezo a darme cuenta de donde estoy. Empiezo a darme cuenta de qué significa toda esa parafernalia que se está montando sobre el tapiz de juego y empiezan a trabajar los lagrimales de mis ojos al mismo ritmo que se suceden los flashes en mi memoria de lo pasado, el presente y de lo que quiero que sea el futuro. Flashes de esos momentos buenos y malos que han forjado mi condición de sevillista y que han hecho que yo sea uno de los 9000 afortunados que nos podemos dar cita en los asientos de ese estadio, ese día y a esa hora. Si, ahora sé qué hago en este estadio. He venido a empujar a mi equipo junto a otros tantos miles que sienten lo mismo que yo para que entre los de la grada y los que van a saltar al campo nos llevemos para Sevilla esa Copa de quince kilos de plata, otra vez la plata, que acaban de poner frente a la salida del túnel de vestuarios y que es el objetivo de todas y cada una de las miradas, de todas y cada una de las cámaras de fotos y de todas y cada una de las cámaras de televisión que, para 1400 millones de personas, están transmitiendo uno de los grandes eventos deportivos mundiales de cada año.

Y mi mente se vuelve loca, y se acuerda de personas que realizaban pocos días atrás comentarios hablados y escritos en contra de mi Sevilla mientras veo a esos mismos personajes haciéndose fotos, hoy, en este mismo estadio, como si las palabras se las hubiese llevado el viento; y veo, a quien dijo desde Madrid que el Sevilla FC era un equipo muy sucio y que tenía en sus filas a mulos y asesinos, cómo se deja las cuerdas vocales en la apasionada transmisión a nivel nacional que está haciendo del partido. Y llega el minuto 27 para que Luis Fabiano, el inadaptado ¿recuerdan?, abra la lata con un gol. Y el delirio se adueña de la zona sevillana del estadio holandés. Y parece increíble después de todo el día que se pueda cantar GOL con tantas ganas. Que digo tantas, con todas las ganas del mundo, como si fuese el primero y el último que se canta en la vida. Y continúa el partido, termina el primer tiempo y miro hacia los altos del Philips Stadion de Eindhoven para ver si están allí los “abonados” del Tercer Anillo de la Fábrica de Sueños de Nervión; si que están si ¡¡no van a estar!!; y hablando con uno de ellos, sin darme cuenta, empieza la segunda parte, y la grada sigue animando como si fuéramos por debajo en el marcador, pero no es así, vamos ganando tanto en las gradas como en el campo, porque parece que estamos solos, porque los ingleses no se ven por ningún lado y mucho menos cuando Maresca, el trotamundos ¿recuerdan?, espera a que llegue el minuto 78 para poner el segundo en el videomarcador bajo el escudo del Sevilla FC y las lágrimas esta vez indican que sí, que la Copa se viene en el avión de vuelta para Sevilla. La voz se me rompe aún más en cada conversación telefónica de cada una de las llamadas que empiezan a llegarme desde Sevilla gritándome que ya está todo hecho, que ya somos campeones. Más de una de estas llamadas las tengo que cortar porque soy incapaz de articular palabra. Y los flashes memoriales se suceden y cada uno de ellos lleva su nombre propio grabado en cada una de las lágrimas que me recorren la mejilla, pero no he acabado de secarme la última gota que sale de mis ojos cuando en el minuto 84 de nuevo Maresca, el trotamundos ¿recuerdan?, hace su segundo gol para poner el tercero en la cuenta del Sevilla FC. Ya no se puede llorar más ni dar más abrazos a personas que seguramente jamás volveré a abrazar en mi vida ¿o quizá si?... La pregunta se queda sin contestar porque llega el cuarto gol del Sevilla FC que marca Kanouté, el de los ocho goles por temporada ¿recuerdan?, en el minuto 89 de partido para certificar una victoria grande, inmensa, en el debut como finalista en una competición internacional del Sevilla FC, en la temporada de su Centenario. ¡¡Que grande!!

Aquella Copa de quince kilos de plata, bendita plata, que se quedaba en medio de la salida de los jugadores de ambos equipos al campo ya tenía dueño. Sólo quedaba levantarla. Y el encargado de hacerlo no era otro que ese jugador defenestrado por la prensa nacional que responde al nombre de Javi Navarro, CAPITÁN del Sevilla FC desde la marcha en el mes de Enero de 2006 del ya eterno GRAN CAPITÁN de la nave blanca, Don Pablo Alfaro Armengot. Y a fe que la levantó, con una mezcla de satisfacción, alegría y rabia en el gesto de su cara, la cara de todos y cada uno de los sevillistas del planeta en ese momento. Esas celebraciones que tanto había visto y envidiado como espectador delante de un aparato de televisión en mi casa la estaba viviendo en directo, en persona, en el estadio donde se disputaba el encuentro y con mi equipo mostrando al mundo que el que la sigue, la consigue. Esta vez eran otros los que miraban y sentían envidia sana.

Ya estoy en Sevilla, es Jueves 11 de Mayo de 2006, son las 15:30 horas y me acabo de levantar de la cama. Me voy al lavabo a lavarme la cara y al terminar, me voy al cuarto del ordenador a ver si están allí mi bufanda llena de mostaza de la hamburguesa que me comí al entrar en el Philips Stadion, la entrada,… en definitiva, cualquier prueba que me convenza de que lo vivido a sido real y no un sueño. Si, es real, totalmente real, y me lo termino de creer cuando me llaman por teléfono para ir a ver al equipo lucir su gesta por las calles sevillanas. La capital fue tomada en su totalidad por los seguidores del mejor fútbol del extremo sur de Europa. La ciudad que le presta el nombre a mi club para lucirlo por el mundo fue reconquistada pocos meses después de caer en manos de los infieles. El espíritu luchador de San Fernando se alió con la Causa Carmesí para no dejar resquicio a la duda sobre la inclinación deportiva del Patrón de la Ciudad que en tantas y tantas veces se ha puesto en duda.

Después de todo esto, las victorias en Liga sobre el Barça por tres a dos el Sábado día 13 y sobre el Real Madrid por cuatro a tres el Martes día 16 quedan como datos históricos que engrandecen las palabras de Don José María del Nido Benavente cuando tuvo a bien predecir que “…el Sevilla FC tendrá en la temporada de su Centenario el mejor equipo de los últimos tiempos…” Dicho y hecho presidente, dicho y hecho.

El sueño ha llegado a un punto y seguido. Continuará el 25 de Agosto de 2006 en Mónaco, contra el FC Barcelona, proclamado campeón de la Champions League y contra el que tenemos que jugarnos el que podría ser segundo cetro europeo del Sevilla FC en su historia, la Supercopa de Europa.

Mientras tanto, yo me vuelvo de nuevo a Eindhoven...

La ¿lista? del Mundial

Cuando uno mira la lista de convocados por Luis Aragonés y tal para formar el combinado español de fútbol que nos tiene que representar en el próximo Mundial de Alemania, la indignación sale a flote de manera explosiva. Pero más indignante es aún si cabe escuchar al viejo caduco y senil seleccionador español y tal dar las oportunas explicaciones solicitadas por los medios de información de por qué se lleva a unos sí y a otros no y tal.

“Porque no pueden ir todos…y tal” ha sido una de las respuestas de este seleccionador cuyo mérito hasta ahora con el equipo nacional a sido clasificarlo para la fase final del Mundial 2006 entrando por la puerta de atrás, como los ladrones y tal.

Este trasnochado se lleva al Mundial a jugadores que han sido lo que ya querrían seguir siendo hoy día. Este mente reseca y tal se lleva a un Mundial a jugadores que acaban de salir de una lesión y que no se sabe que nivel real podrán dar cuando el balón se ponga a rodar. Este tipo impertinente y tal se lleva a jugar a un Mundial de fútbol a hombres que han demostrado sobradamente que son la gran mentira del fútbol nacional, endiosados por los medios deportivos centralistas por el simple hecho de jugar en la capital del reino y tal. Este Rey de Copas que tenemos por seleccionador se lleva a un Mundial de fútbol nombres, que no hombres, aunque alguno que otro de estos últimos si que vayan y tal.

Pero claro, hablar generalizando es muy fácil y tal, por ello vamos a dar nombres. Por si me equivoco, que lo dudo, que tenga el interesado la ocasión de darme bien dado en la boca al término de la mayor competición internacional de fútbol que se pueda ofrecer hoy día.

Michel Salgado: Gran jugador de casta y vergüenza torera sobre el terreno de juego, pero venido a menos. Últimamente algo más lento que años anteriores. Se incorpora bien al ataque, pero su forma física actual no es del todo comparable con la exhibida años atrás. En el momento que su par lo deja atrás en dos ocasiones, da más patadas que un cigarrón en una lata. ¿Es que no hay otro lateral derecho mejor en España?. Este es el primer caso de mundialista por su pasado…

Pablo Ibáñez: Dos añitos en el Ath. Madrid y ya va a un Mundial. Sin dar nombres, cualquiera tiene en mente a más de un futbolista con más experiencia internacional y saber hacer que este jugador. Pero Madrid tira mucho y tal…

Marchena: Este jugador va porque le marcó un gol a Bosnia que le salvó la cabeza al actual seleccionador. Sin ritmo de partidos en los últimos meses y tal…

Juanito: Jugador titular indiscutible en un club que ha terminado siendo el quinto equipo más goleado de la Liga y que se ha ganado el derecho de jugar en Primera División el año que viene al salvarse del descenso en la penúltima jornada liguera y tal. Casi ná…

Antonio López: ¿Con quién ha empatado este? Más de lo mismo que con Pablo Ibáñez y tal, y del mismo equipo ¿les suena?...

Joaquín: ¡¡QUIETOSSSSSSS!! La mega-estrella nacional del interior derecho. Del mismo equipo que Juanito. Pero si su compañero anterior no era capaz de atajar lo que le venía hacia la portería, este tampoco ha sido capaz de servir los balones que le hacían falta a sus compañeros de ataque para marcar goles y no quedarse el cuadro bético con los pírricos 34 goles que han marcado en toda una temporada. El Señor de la Banda Derecha ha visto como su equipo ha terminado como el MENOS GOLEADOR de toda una temporada liguera y tal. Pero claro, por eso dice él que este año tiene ya que irse del Betis. ¿Quieren ustedes saber la realidad de este jugador?; pedirle a Lopera ALGÚN FAX y tal donde se haya hecho nunca una OFERTA DE COMPRA por este futbolista. Aseguro desde ya que no podrá mostrarlo el dirigente bético. Este futbolista es una de las grandes mentiras del fútbol nacional…

Raúl: ¡¡Bueeeeeeenooooooooooooo!! Con la iglesia hemos topado. No ha rascado bola en todo el ejercicio liguero, pero tiene puesto fijo en la selección nacional por lo que ha sido tiempo atrás. Viviendo del pasado y gracias al club en el que juega. Una Vaca Sagrada que ya no da leche, ni la dará. Dice el caduco de Hortalezas que hace grupo; Milikito también y tal…

Fernando Torres: Otro Joaquín, pero al menos el gaditano es simpático. Uno que está viviendo más de la prensa que de lo que ofrece en los terrenos de juego. Seleccionado por decreto. Pónganlo en otro equipo mediocre que no lleve el nombre del club en el que juega y a ver si jugaba el Mundial o no. Quitando los goles que ha marcado de penalti y tal, 10 ha hecho esta temporada. Si señor, un matador nato, pero de esperanzas…

Y a estas perlas del fútbol nacional pónganle ustedes a un entrenador que se ha quedado dando carreras por la banda del Calderón y que se niega a abrir los ojos a la actualidad.

El cocktail está servido.

Y sin beberlo, el sabor se antoja muy pero que muy amargo… y tal.

Campeones UEFA CUP 2006

Victoria a ralentí

Con la mente puesta en el histórico partido de Eindhoven, el Sevilla FC a arrancado tres puntos en la capital de la Costa del Sol a costa de un equipo que ha demostrado el por qué se va a Segunda División de la forma que lo ha hecho. El Sevilla FC, tras el encuentro de hoy, ya está matemáticamente clasificado para disputar la próxima temporada competición UEFA. Europa disfrutará un año más con el juego del equipo sevillista.

Palop; Crespo, Ocio, Escudé, Puerta; Sales, Renato, Jordi, Jesuli; Navas y Kepa. Este es el equipo titular del día de hoy que ha conseguido meter al Sevilla FC por tercer año consecutivo en la UEFA CUP de la temporada venidera para seguir rompiendo moldes en la historia centenaria sevillista. Sin tener que esforzar la maquinaria lo más mínimo, el primer equipo andaluz ha pasado sobre el malagueño como si esto de jugar al fútbol fuera un don exclusivo de los de Nervión.

No hicieron falta más de 17 minutos para que Renato, de trallazo desde 20 metros tras rechace de la defensa rival, rompiera el empate inicial del encuentro. El Sevilla FC, jugando a la velocidad de un alumno de prácticas de autoescuela, controlaba a la perfección el juego del Málaga CF de modo que no lo dejaba acercarse a la meta defendida por Andrés Palop y le metía el miedo en el cuerpo en cada jugada de ataque.

Con ese resultado de 0-1 llegaba el final de la primera parte. Del mismo modo que en el partido anterior contra el Getafe, el marcador se antojaba corto para el juego y las ocasiones creadas por el conjunto finalista de la UEFA CUP.

El segundo periodo transcurrió tal y como se esperaba. Un Sevilla FC controlando el partido y un Málaga CF que demostraba ser un auténtico despropósito sobre el terreno de juego. Tras varias jugadas de peligro sevillista, la ocasión más clara para terminar de romper el encuentro la tuvo el canterano Alfaro en el minuto 72, cuando tras recoger un rechace dentro del área rival acomoda el cuerpo de forma perfecta para pegar con maestría y sobriedad con la pierna derecha sobre la meta de Arnau, pero el balón termina en el poste izquierdo de la meta malagueña y paseándose por toda la línea de gol de la portería sin poder ser empujado por ningún jugador sevillista.

La mejor ocasión del Málaga llegó en el minuto 78, cuando Gabriel agarra el balón dentro del área sevillista tras un tumulto y termina estrellando el esférico en el larguero. Pero eso no hizo más que recordarle al Sevilla FC que el partido seguía vivo y que la renta en el marcador era peligrosamente corta. Con toda la maldad del mundo, los de Nervión esperaron agazapados el momento adecuado para rematar la faena en una contra, allá por el minuto 89, en la que Martí conduce el esférico hasta las inmediaciones del área rival para poner el balón sobre Fernando Sales que, tras internarse por la zona derecha del ataque sevillista y driblar a Ribeiro, a quien tuvieron que ir a recoger luego a la malagueña calle Larios, termina poniendo el balón de forma inalcanzable para el meta Arnau y alojándolo en las redes para hacer el definitivo 0-2 con que ha dado fin el partido.

Pitido final de Pérez Lima que sirve para dar paso a los días más importantes del sevillismo desde hace cincuenta años para acá.

Ahora, a pensar exclusivamente en el partido del día 10 en Eindhoven, donde se pone en juego el sueño y las ilusiones de todos y cada uno de los que sentimos en Rojiblanco. Y seguramente, Dios lo quiera, será la segunda vez que nos clasifiquemos este año para disputar la UEFA CUP del próximo curso futbolístico.

A por un nuevo hito

De ganar el encuentro de hoy, el Sevilla FC se clasificaría matemáticamente por tercer año consecutivo para disputar una competición europea. Otro dato histórico que puede reventar el Sevilla FC en el día de hoy junto a los ya destrozados en esta espectacular campaña. Y no es nada fácil conseguir encadenar esas clasificaciones. Tan sólo hay que mirar cuantos equipos nacionales, a lo largo de su historia, han llegado al logro que hoy puede escribir el Sevilla FC en su ya Página de Oro de la temporada del Centenario.

Tal y como hace Antonio Puerta en la fotografía, el Sevilla FC, con su Consejo de Administración a la cabeza, con la grada volcada partido a partido y con un equipo de jugadores y técnicos que se dejaban contagiar y transmitían sobre el terreno de juego las peticiones de los dos primeros, apuntaba alto, muy alto, y el resultado no ha podido ser mejor.

Me vienen a la cabeza centenarios de otros equipos que han pasado sin pena ni gloria. Me vienen a la cabeza titulares de diarios deportivos nacionales con un Centenariazo como titular que despejaba cualquier duda sobre la campaña realizada por dichos equipos.

El Sevilla FC no. El Sevilla FC ha vivido, está viviendo, un Centenario que ya quisieran para sí los que vienen detrás. Tanto en el ámbito social como en el deportivo, el éxito a sido rotundo. Inolvidable.

Recuerdo nombres como Haurie, Ortega, Cepeda, Fernández, Aguilar, Varela, Miguélez, Caridad, Cariño, Acien, Ocaña, Ordoñez, De la Morena, Rengel... una lista interminable de "lumbreras" de la información deportiva que hace pocos meses trataban al Sevilla FC de un modo miserable para, mire usted por donde, no sólo babear hoy por hoy resaltando el juego y los logros de este equipo, sino que uno de ellos se dedica a buscar entrada para la Final de la UEFA CUP a disputar en Eindhoven ofreciendo 600€ a quien se la venda.

Con lo bonito que es pasear por Sevilla con la cabeza en alto... y vestirse por los piés.

Pero en fin, que esto es lo que hay. Que el Sevilla FC ganando hoy está de nuevo el año que viene disputando el trofeo europeo al que ha llegado este año a la final. De nuevo aspirante a todo. De nuevo favorito para repetir la hazaña de este curso europeo.

Pero ojo, que la clasificación europea puede y debe venir por partida doble. Si el Sevilla FC se proclama campeón de la Copa de la UEFA 2006, logrará clasificarse también para volverla a disputar el año que viene como defensor del título.

Clasificado para la UEFA por partida doble en el mismo año. ¿Hay quién de más?

Y otros arañando más que una tortuga en un cubo...

Where soccer takes its name

...y que me perdonen los puristas, pero es que al ritmo que lleva el Sevilla FC vamos a tener todos los sevillistas que acudir a una escuela de aprendizaje de inglés para desenvolvernos con soltura en los encuentros ínter semanales que nos esperan, otra vez, el año próximo.

Las dos últimas tormentas que se han asomado por la ciudad de Sevilla venían acompañando a un ciclón futbolístico llamado Sevilla FC que en el día de hoy ante el Getafe ha dejado patente el por qué es uno de los finalistas de la Copa de la UEFA y el por qué personas como Fernando “Carreritas” Vázquez tienen el miedo metido en el cuerpo de verlo tan cercano en la clasificación. Un entrenador (el del equipo vigués) a quien después de sus últimas declaraciones a la prensa por el asunto del partido aplazado Sevilla FC – FC Barcelona, se le puede comprender el por qué de sus carreritas por la banda de los estadios españoles; para que la presión sanguínea le aumentara y le llegara bien la sangre al cerebro. Se nota que últimamente no pasa de pasearse por el área técnica…

Juande Ramos ha sacado en el día de hoy un equipo formado por Palop; Dani Alves, Javi Navarro, Escudé, David Castedo; Jesús Navas, Martí, Maresca, Adriano; Saviola y Luis Fabiano. Pronto tomó el control del partido el Sevilla FC con un juego expeditivo detrás, con rapidez en la movilidad del esférico sobre el centro del campo, las entradas apuñaladoras por las bandas y con una creatividad en la zona de definición que desmantelaba una y otra vez el entramado defensivo getafense.

Se veía desde el principio del partido que el gol en el día de hoy iba a tener nombre propio, y tras una falta en la banda izquierda del ataque sevillista, Martí pone la bola en juego sobre el espacio aéreo de la portería rival para que entrara Javi Navarro al remate, el cual hace que Pulido, en su intención de defender la jugada, meta el primero de la tarde en propia meta cuando el reloj marcaba el minuto 21 de juego. Pero el Sevilla FC quería más y apretaba al rival contra las cuerdas una y otra vez, para en el minuto 31, una jugada trenzada hace que Maresca tire a puerta desde la frontal del área un balón que no logra blocar el meta visitante y el rechace de este es aprovechado por Saviola para hacer el segundo.

Pero ni por esas el Sevilla FC iba a levantar el pié del acelerador. El equipo de Nervión tenía ganas de hacer disfrutar a la grada en el día de hoy y demostrar a algún que otro seleccionador nacional que hay que mirar bien a quienes se lleva al Mundial de Alemania. Al borde del minuto 40, centro de Dani Alves al área desde su banda natural y remate inapelable de Luis Fabiano de cabeza al primer palo que hace inútil la estirada de Luis García. El marcador comenzaba a ser razonablemente justo ante el juego exhibido por uno y otro equipo sobre el tapete de la Fábrica de Sueños.

Terminó el primer tiempo con ese resultado para satisfacción de los jugadores del Getafe, porque a la parroquia carmesí se le antojaba corto. El segundo periodo del encuentro fue un calco del primero, con un Sevilla FC volcado sobre la meta rival y un Getafe que ha llegado a irse de Sevilla sin tirar ni una sola vez entre los tres palos de la meta defendida por Andrés Palop. Afortunadamente para los intereses de los madrileños, el Sevilla FC jugó toda la segunda parte dos velocidades por debajo de lo que había funcionado durante el primer periodo, pero es que la cercanía del próximo encuentro contra el Málaga CF el sábado que viene, la Final de la Copa de UEFA del miércoles 10 y la inteligencia de los planteamientos de Juande Ramos aconsejaban que los últimos cuarenta y cinco minutos, con el partido decantado, se jugaran de ese modo.

Destacable la entrada en el terreno de juego de Crespo en el minuto 55 sustituyendo a Dani Alves y de Bruno en el minuto 78 sustituyendo a Javi Navarro, lo que sumaba a la fiesta del Sánchez Pizjuán a los pupilos de Manolo Jiménez en reconocimiento al maravilloso trabajo que está haciendo el “Sevilla Atlético” en la Segunda División B.

Imposible en el día de hoy destacar a ningún futbolista sevillista por encima de otro, debido al fenomenal trabajo de todos y cada uno de los jugadores que saltaron al terreno de juego, pero si que es reseñable la impresión dejada por un Javier Saviola con una punta de velocidad mayor a la mostrada hasta la fecha y un Adriano que, tras los últimos encuentros, se ha reencontrado con su forma habitual de hacer fútbol.

El Sevilla FC ocupa actualmente la sexta plaza de la tabla clasificatoria con 59 puntos. La Champions queda ahora a seis puntos, el rival que llevamos por arriba a uno y el que llevamos por abajo se encuentra a cuatro puntos de distancia. Teniendo en cuenta que a todos los equipos de la Liga le quedan dos partidos por jugar y que al Sevilla FC le quedan tres por el aplazamiento del partido contra el FC Barcelona, el techo de la clasificación para el Sevilla FC aún no está marcado.