Al César lo que es del César

Ríos de tinta han corrido desde incluso antes de que Juande Ramos fichara por el Sevilla FC por varios y malintencionados motivos.

Que si entrenó a no sé que equipo, que si es amigo de tal o cual, que es muy serio, que no tiene lo que el entrenador que se ha ido, que si no renovó con tal equipo por esto o aquello (decía alguno aduciendo razones inverosímiles). Durante el campeonato liguero ha sido escudriñado con lupa en cada gesto, cada palabra, cada decisión, cada entrenamiento, cada partido.

Juande Ramos es ese entrenador que vio desaparecer de su equipo a Baptista y Sergio Ramos en un abrir y cerrar de ojos y no se le escuchó ni una mala palabra. Juande Ramos es ese entrenador que vio como le traían a futbolistas de los que decían los entendidos de esto del fútbol en sus columnas o sus programas que “el equipo está muy mermado porque lo que ha venido no llega a igualar ni mucho menos lo que se ha ido”.


Un entrenador que ha tenido que ver cómo desde la grada del Ramón Sánchez Pizjuán se coreaba el nombre de otro entrenador que venía con la sana intención de ganarle el partido para llevarse los tres puntos en juego y, ya de camino, coger ventaja en el gol-average por un posible empate a puntos a final de temporada que le pudiera dar la clasificación para Europa.


Pues bien, Juande Ramos se ha mantenido siempre en su sitio, que no es otro que dirigiendo al equipo. No ha entrado en ninguna polémica, es mas, las dribla como nadie, sabiendo estar siempre, controlando cada situación externa al terreno de juego. Juande Ramos no sólo ha demostrado que después del entrenador que se fue el verano del 2005 había fútbol, sino que ha mejorado los registros de todos los años anteriores mientras desde la grada y los medios se le seguía cuestionando.

Ya va siendo hora de darle a cada cual lo que se merece, y Juande Ramos se lo merece todo por la profesionalidad y el trabajo que está demostrando desde que llegara al Sevilla FC, y por qué no decirlo, porque está siendo (y esta es una valoración muy personal del que escribe) el mejor entrenador del Sevilla FC en muchos de los últimos años anteriores.

Mucho se ha hablado de recibir al MISTER en La Bombonera con honores por parte de la grada, que bien que se lo merece el hombre, pero creo que no es la afición la que tiene ahora que mover ficha entorno a la figura del entrenador; ahora el que tiene que decir “aquí estamos para darte lo que te mereces” es la directiva del club.

Creo fielmente que este es el entrenador idóneo de futuro que necesita el Sevilla FC para llegar a cotas hasta hace poco inimaginables, del mismo modo que creo que es el momento de sentarse con el MISTER para, termine como termine la clasificación liguera del equipo en la jornada 38, presentarle desde ya un proyecto a dos o tres años vista en los que él sea el máximo responsable técnico para traer al Sánchez Pizjuán esos títulos que llevamos tanto tiempo esperando.

Al César lo que es del César, o lo que es lo mismo, a Juande Ramos lo que es de Juande Ramos…